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Devocionales cristianos: El fin de Babilonia la Gran Ramera.

Escribe Javier R. Cinacchi en
https://www.estudiargratis.com.ar/biblia-devocional-cristiano/apocalipsis-19-babilonia.html
El texto en la Biblia en dos versiones distintas, para comprenderlo mejor:
(Apo. 19:1) Después de esto oí una gran voz de gran multitud en el cielo, que decía: ¡Aleluya! Salvación y honra y gloria y poder son del Señor Dios nuestro; (Apo. 19:2) porque sus juicios son verdaderos y justos; pues ha juzgado a la gran ramera que ha corrompido a la tierra con su fornicación, y ha vengado la sangre de sus siervos de la mano de ella. (Apo. 19:3) Otra vez dijeron: ¡Aleluya! Y el humo de ella sube por los siglos de los siglos. (Apo. 19:4) Y los veinticuatro ancianos y los cuatro seres vivientes se postraron en tierra y adoraron a Dios, que estaba sentado en el trono, y decían: ¡Amén! ¡Aleluya! (Apo. 19:5) Y salió del trono una voz que decía: Alabad a nuestro Dios todos sus siervos, y los que le teméis, así pequeños como grandes. (De la versión RV 1960)


(Apo. 19:1) Después de esto oí en el cielo un tremendo bullicio, como el de una inmensa multitud que exclamaba: «¡Aleluya! La salvación, la gloria y el poder son de nuestro Dios, (Apo. 19:2) pues sus juicios son verdaderos y justos: ha condenado a la famosa prostituta que con sus adulterios corrompía la tierra; ha vindicado la sangre de los siervos de Dios derramada por ella.» (Apo. 19:3) Y volvieron a exclamar: «¡Aleluya! El humo de ella sube por los siglos de los siglos.» (Apo. 19:4) Entonces los veinticuatro ancianos y los cuatro seres vivientes se postraron y adoraron a Dios, que estaba sentado en el trono, y dijeron: «¡Amén, Aleluya!» (Apo. 19:5) Y del trono salió una voz que decía:«¡Alabad a nuestro Dios, todos sus siervos, grandes y pequeños, que con reverente temor le sirven! (De la versión Bíblia al Día)

En este devocional centrado en la Biblia, y con aplicación actual, extenderemos la mirada a través del tiempo, así han hecho millones de cristianos que han encontrado esperanza y fortaleza en las palabras mencionadas del texto bíblico citado. En Apocalipsis 19:1-5 (“Revelación 19:1-5”) los cristianos expresan una alabanza a Dios, porque la salvación, la gloria y el poder de Dios se hace manifiesto en un punto de la historia en que ocurre un gran acontecimiento de una forma terminante: El juicio de Dios. Lo llamado “La Gran Prostituta” es destruida. La “Gran Prostituta” es un concepto, una forma alegórica, que también recibe el nombre de “Gran Babilonia” (Ap.17:5), y es descrita como “Madre de las rameras y abominaciones de la tierra”, representa a la potencia del sistema del mundo que hace lo contrario a las leyes de Dios.

Todo cristiano se enfrenta con la tentación y el conflicto con la Gran Babilonia. Algunos desde mi perspectiva exagerando, dicen que es todo el sistema de este mundo, otros lo limitan a alguna nación específica, religión, grupo entidad o individuo. Para mí es una influencia espiritual que se está infiltrada en todos los sectores, aún dentro de algunas iglesias está de forma oculta. En algunos lugares se deja ver fácilmente, en las calles donde reina la violencia, droga, robos, inmundicia sexual, brujería, etc. no se oculta en lo más mínimo. En la corrupción está susurrando corrompiendo. La veo presente en el obtener riquezas y fama a costa de manipular o engañar. Está trabajando ocultamente en muchos corazones, aún queriendo hacer caer a siervos de Dios, y si puede matarlos lo hace (Ap. 17:6).

Pero téngase en cuenta que sinónimo de Babilonia no es “los barrios bajos” Babilonia fue una de las capitales más lujosas del imperio Babilónico, y aparentemente estaba bien desarrollada en lo económico e intelectual. Parecería que donde más reina este espíritu es en las capitales y alrededores.

Cuando un creyente es atacado por la impresión de que la “Gran Ramera” se está imponiendo, se ve fortalecido al saber que los días de esta están contados, será destruida, Apocalipsis 19:3 dice que “el humo de ella sube por los siglos de los siglos.” es como saber que aquello inmundo que molestaba continuamente, luego continuamente se podrá observar su destrucción. Es un motivo de alabanza a Dios, los santos redimidos por Jesucristo, en el cielo dicen: “¡Aleluya!”, los más grandes santos también expresan alabanzas (los 24 ancianos) “¡Amén, Aleluya!” El trono mismo de Dios expresa: “Alabad a nuestro Dios todos sus siervos, y los que le teméis, así pequeños como grandes”.

Estimado que lee ahora este devocional cristiano en Estudiargratis.net, está peleando una batalla de la cual se sabe el final: mantenga su fe, la destruida será Babilonia y sus seguidores. Cante alabanzas a Dios, Dios es justo, su justicia es manifestada. No se deje confundir, la Gran Babilonia se muesta suntuosa y fuerte, se levanta todavía con adornos, lujos, y poder; extiende sus influencias desde lugares ricos a lugares de los más pobres y marginados. No obstante todo eso se le acabará, y por los siglos de los siglos mientras esté elevándose el humo de su destrucción los fieles a Dios cantarán.

Ore a Dios que lo proteja y libre de todo mal, extienda el evangelio para colaborar en la salvación de los más que pueda, y de gracias porque todo lo malo tiene un fin, dele gracias también a Jesucristo, es por Él que no terminaremos destruidos con ella, fortalézcase cada día en Dios con oración y estudio de la Biblia, si aceptó a Jesucristo como su Señor y Salvador es uno de los vencedores del corrupto sistema, un día y por la eternidad estará bajo el reinado esplendoroso de Jesucristo el Hijo de Dios. No deje de ir a la iglesia cristiana, fortaléscase en Dios, no está sólo, en este mismo momento en que lee hay multitud de santos cantándole alabanzas a Dios que no doblaron sus rodillas al poder de la Gran Ramera.

Cuando esté preocupado pasando por luchas contra la influyente y misteriosa Babilonia, recuerde lo que los santos gritarán en su derrota final: “¡Aleluya! Salvación y honra y gloria y poder son del Señor Dios nuestro; porque sus juicios son verdaderos y justos; pues ha juzgado a la Gran Ramera que ha corrompido a la tierra con su fornicación, y ha vengado la sangre de sus siervos de la mano de ella.” “¡Aleluya! Y el humo de ella sube por los siglos de los siglos.”