El planeta
Tierra es uno más entre muchos astros en el cosmos. No se llegan
a poder apreciar los límites del universo, tan es así que se
supone que está en continua expansión. Desde la perspectiva del
humano, se puede decir que el universo es infinito, ya que no se
le conoce límite alguno.
Cuando se
observa las estrellas, suponiendo estamos sin ninguna
obstrucción visual en el sentido de algo como ser un edificio, o
montaña, se alcanza a ver lo que se denomina la mitad de la
bóveda celeste. Como es todo tan inmenso podemos imaginarnos, al
menos desde nuestra perspectiva que estamos en el centro,
entonces vemos la mitad. Por consiguiente desde distintas partes
del planeta Tierra, se observará la bóveda celeste de distinta
forma, una mitad.
Dos términos que
muy probablemente ha escuchado mencionar: cenit y nadir;
el cenit, se toma como el punto de la esfera celeste que se
encuentra por sobre la cabeza del observador, el nadir se le
dice al que quedaría, desde el punto del observador en los pies.
Si el observador gira su cabeza vería la mitad de la esfera
celeste del cenit, la del nadir le queda oculta. Ahora cuanto
más nos elevaríamos de la tierra, ejemplo: mirar desde una
montaña, avión, satélite, mas quedaría visible agrandándose el
ángulo de visión.
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En la
observación de los astros, hay que tener en cuenta que la
Tierra gira en torno a su eje, dando un giro completo cada 24
horas (aprox.). Por ello si se observan las estrellas parecerán
que estas se mueven, cuando en realidad nos movemos nosotros más
que ellas por nuestro ángulo de visión. Entre los astros que
están o no están en nuestro ángulo de visión por ejemplo se
encuentran los dos que más fácilmente diferenciamos: El Sol y la
Luna.
Pero en relación
a las estrellas, según la ubicación de la persona percibirá de
una forma o de la otra, no es lo mismo estar en un polo, que en
digamos… a mitad de ellos, en esta última posición se podrían
ver toda la bóveda celeste a medida que la tierra gira (mas allá
que a simple vista no se vean por la luminosidad del Sol).
El Sol
está formado por gases y en su centro se genera calor debido a
un crisol nuclear. Fusiones nucleares liberan cantidades enormes
de energía. Es una estrella, las estrellas generan luz, los
planetas no. El Sol es la principal fuente de energía de la
Tierra, genera Luz y calor. Sobre su tamaño es de destacar que
posee el 99% de la materia del Sistema Solar (del Sistema solar
al que pertenece la Tierra). Tal es su tamaño que genera una
atracción gravitatoria y los planetas giran alrededor de este.
La tierra
gira alrededor del Sol, y tarda un año en hacerlo (en realidad
en: 365 días 6 horas 9 minutos 9,76 segundos); se supone con una
órbita de circunferencia (con un radio de 150 millones de
kilómetros) Elíptica, pero casi un círculo perfecto ya que tiene
una excentricidad de sólo 0.0167; es decir es casi un círculo.
Y, no todos los planetas tienen una excentricidad igual; y para
complicarse más a un, el Sol no está totalmente en el centro.
Las
estaciones climáticas en la Tierra están muy relacionadas
con la posición de esta con respecto al Sol, y por gases de
invernadero que hay en la atmósfera terrestre, sin los cuales la
Tierra no conservaría el calor, y estos gases están aumentando
haciendo que la temperatura ascienda lentamente.
La tierra cuando
rota, lo hace en forma de trompo o “cono” provocando un ángulo
de 23,24 grados, y según la ubicación es verano cuando el
hemisferio de la Tierra está inclinado hacia el Sol, e invierno
cuando su inclinación la aleja. La inclinación en el sentido de
que le llegan por el ángulo cantidad de rayos solares por mas o
menos tiempo y más o menos intensamente según la estación y
proximidad al Sol por dicha inclinación. |
Pero atención
que esto depende de qué zona estamos hablando, en los polos se
mantienen siempre frío porqué su inclinación nunca los acerca lo
suficiente al Sol, en cambio en el ecuador, la temperatura casi
no cambia, los rayos del Sol están en un mismo ángulo. Según en
qué zona se esté variará el clima, como así también la duración
de los días y noches. Por ejemplo, en el polo a mediados de
invierno no hay luz diurna que es cuando el polo está inclinado
lejos del Sol, y en verano no hay noche.
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