Leer la novela online: Novela "EL Grupo de los Diecinueve Jóvenes 2" Separados en Esferas Lejanas.

Es la página 105 de la novela.
A lo cual más o menos sus tres amigos estuvieron de acuerdo.

Llegan a un camino, allí son fácilmente visibles. Verónica dice que tienen que transitar por éste, que se lo había indicado Sueñosreales, y al final está la lágrima de luz, y deben entregarle al portador la piedra que tanto valoran en ese mundo, luego de probar que la lágrima de luz sea genuina. Deciden continuar al día siguiente.

Recorren días el camino de tierra entre árboles, vegetación y rocas. A veces subiendo pequeñas montañas, a veces atravesando pequeños ríos, por medio de improvisados puentes realizados con troncos. Llegan al final de tal camino. Observan un largo muro de pocos metros de altura. Frente al camino, en una pequeña columna ancha, está la lágrima de luz unida a un collar, rodeada de vidrios. Pequeña luminosidad resplandece de la lágrima de luz.

Se paran ante tal estructura. Comienzan a charlar estando alertas, se mueven en rededor de la lágrima de luz. A la hora se acercan tres personas bien vestidas, de blanco, y elegantes.

Verónica les muestra la piedra, y señala a la lágrima de luz. Uno de ellos saca un pequeño artefacto. Posee una tapa, la corre, toca un botón, y un vidrio desciende, pudiéndose así sacar la lágrima de luz. David la señala. Verónica le deja la piedra a David, y agarra la lágrima de luz, y se la da a Pablo.

Pablo toma una piedra de al lado del camino, coloca la lágrima sobre otra. Levanta un brazo con la piedra de apariencia dura, da un salto, y al descender suma un rápido movimiento para lanzar la piedra a la lágrima de luz, esta impacta en ella. La lágrima de luz se quiebra, la piedra con la cual la impacta se parte.

Todos se miran, David es el primero que se para ante los otros tres de esa esfera, desafiante; sus compañeros se acercan y los cuatro intercambian miradas fijas a los tres que los miran fijo. Lentamente otro de ellos saca un idéntico artefacto como el anterior, pulsa en un botón, y de un costado de la estructura se abre un compartimiento; de allí sacan otra lágrima de luz, que estaba oculta a la vista.



Es la página 106 de la novela.
Verónica y Pablo repiten lo que anteriormente habían realizado. Esta vez al impactar la piedra, esta se parte en pedazos, la lágrima de luz resbala sin romperse, y emite mayor luminosidad estando intacta.

Los cuatro aprendices de guardianes no pueden contener una sonrisa de alegría. Los otros tres sujetos imitan sus sonrisas. David les entrega la roca que tanto valoran, Pablo la lágrima de luz.

Uno de los extraños saca un aparato, lo manipula dando la impresión de que escribe en él, o selecciona opciones. Al rato llega un pequeño robot con un gran bulto.

...Los cuatro se miran, miran a los tres sujetos. Uno señala al robot, el robot deja el paquete en el piso, Pablo lo agarra, dan media vuelta y se marchan despacio, habiendo cumplido con su misión. En el paquete había suministros básicos y un mapa en algo semejante a un vidrio que muestra la ubicación de ellos, y el recorrido a seguir a la puerta. El mapa es un dispositivo electrónico, e iba actualizando en donde estaban ellos.

Van en dirección a la puerta, para atravesarla a la indicación de Sueñosreales, que sería a las noches de emprender su regreso. Como si hubiera calculado el tiempo o supiera lo que pasaba allí...

Cuando vuelven, deciden pasar cerca del campamento por curiosidad, sin obedecer al mapa, que se la pasó emitiendo un sonido molesto de alarma, aunque no fuerte mientras se alejaban de su recorrido hacia la puerta. Lo hacen con gran precaución. Del campamento, solo quedaban rastros de haber sido totalmente destruido. Las construcciones derrumbadas, sin señales de personas y con algunos árboles pequeños plantados.