Leer la novela online: Novela "EL Grupo de los Diecinueve Jóvenes 2" Separados en Esferas Lejanas.

Es la página 170 de la novela.
Pero el desarrollo, o el poder ¿Esto es lo que nos hace feliz? No, sino sentirnos satisfechos con nosotros mismos. La mayoría de los jóvenes se siente satisfecho, al estar satisfecho en el amor. Y es algo muy lindo, pero el verdadero logro en una persona, lo más valioso que uno puede hacer. En general no está en el amor, está en cumplir con su destino. Y al destino uno lo cumple, pese, por ejemplo a tener que separarse de la persona amada.

Conocí a un hombre en su esfera. Un hombre común que nació teniendo buen dinero. Este primero tenía empresa, y manejaba gente y hacía productos, primero trabajaba y cumplía con un destino honorable. Luego cerró todo y con el dinero que le quedó disfrutó de su vida. Fue más feliz después, pero era más útil antes. Afortunadamente para él en su interior se sentía “que ya había cumplido”. Les quiero decir con esto, que aveces lo más importante no es ni el poder, ni el dinero, ni el amor, sino el cumplir con el destino.

Y hablando de los que escriben... En este momento su amigo Rubén está viviendo en una carpa protegiendo la puerta, y escribiendo las crónicas. ¿Recibirá alguna paga por esto? No, más allá de poder seguir teóricamente viviendo. Tiene la alegría de estar con Abbila. Pero la mayoría en el universo no tiene la alegría de tener siempre a una divertida pareja a su lado… a veces sí, aveces no. Y esto es lo que ahora les enseño: Uno es responsable con su destino, con la tarea que tiene que desempeñar en la vida mientras la tenga que hacer.

Permítanme unas palabras más para las Crónicas, ¿Cual es la paga que nos da la vida aveces por cumplir con nuestro destino? Cuando alguien hace lo que siente su destino -no siendo un lunatico-, hablamos de los que cuerdamente hacen lo que sienten su destino, sin generar ningún mal a otro. Un simple bailarín por ejemplo, que cada vez mientras le da el cuerpo y tiene la oportunidad, baila. Tal vez alguno gana dinero por bailar, y esa es su paga, pero ajeno a esto, a la mayoría de los bailarines les gusta bailar, y su paga que les da la vida, no es ni más ni menos que poder bailar. Y otros se deleitan viendo como bailan, otros que tal vez tienen un destino distinto. No hay que anhelar el destino de otro, cada cual tiene que descubrir el propio. Y cada cual recibe su paga, a la manera que paga Aquelqueserá. Tal vez se encuentren rodeados alguna vez por un desierto árido, donde uno no ve qué podría salir de bueno. Manténganse sabios y rectos, y la vida les pagará bien, aunque deban esperar más allá de lo que suponen normal. ¿Porqué qué logro es el poder soportar lo que cualquiera pueda? Uno tiene que soportar más allá de lo que uno pueda para sobresalir.



Es la página 171 de la novela.
Yo creo que Cristian y Carla, podrían haber soportado más. Seguramente ahora todos nos beneficiaremos y podremos soportar, incluyo ellos mismos, más y mejor nuestras responsabilidades. Cuando uno soporta bien sus responsabilidades es para bien de todos. Y cada uno recibe su paga, no cualquiera puede ser rey, pero ser rey, tiene sus esfuerzos y sus beneficios. Y así cada quien según lo que haga, si los beneficios les llegan, o saben apreciarlos, cada cosa tiene su beneficio y su complicación. La vida de un músico, es distinta a la de un policía. Hay que saber también poder apreciar lo bueno que se tiene. ¿Saben? Es curioso… una vez tuve una charla con una bailarina, que me dijo que no disfrutaba bailar porque lo hacía por trabajo, y que su hija quien bailaba bien, ella no quería que trabajara de bailarina, porque quería que su hija disfrutara del baile que es hermoso, y que así iba a ser más feliz. Me resultó curioso, interesante, digno de ser mencionado. Espero sepan disfrutar lo que hacen en este momento en sus vidas.

—Miguel, ahora tú y yo nos mediremos un poco en combate.

Sueñosreales se pone en pie. Respira hondo y se cruza de brazos. El Anciano apenas lo mira de reojo y continúa diciendo aun sentado:

—Carla traé un planta, y desconéctate de ella, dejala ahí -una planta rápidamente comienza a crecer cerca de donde señaló El Anciano-. Yo y Miguel nos pondremos en diagonal, yo atacaré la planta y tu Miguel tienes que evitar que la destruya, pero tu rayo no puede ser más fuerte que el mio ni más débil, vas a tener que saber por adelantado cuánta fuerza pondré, ni más fuerte ni más débil, o el poder de alguno de los dos seguirá de largo. Y ya que estás Cristian, fijate que no haya nadie en el trayecto para los dos lados, hasta donde alcances a ver rápidamente.