Leer la novela online: Novela "EL Grupo de los Diecinueve Jóvenes 2" Separados en Esferas Lejanas.

Es la página 157 de la novela.
—¿Loquísimo y se sabé cuál es el punto más lejano?

—No, por eso hasta es probable que científicos que crearon las puertas algunos estén vivos. ¿Sabés qué? Hay millones de galaxias más alejadas que donde está Destructor.

—¿Si uno se pierde puede irse muy lejos?

—Generalmente no, pero hay esa posibilidad. Hay una leyenda ¿Te la cuento?

—Dale y la escribo.

—Se dice que cuando un guardián, quiere alejarse de todos, y no extraña nada, al contrario rechaza a todo lo que conoce. Cuando un guardián ya no ama a nadie, ni extraña a ningún lugar. Es tan fuerte ese sentimiento que el sistema de las puertas, lo hace ir tan lejos que nunca se sabe nada más de él, hasta que ya nadie lo recuerda. Se sospecha que a algunos le ha pasado esto. De no ser así las puertas te mandan lo que ellas interpretan cómo cercano. Pero esto puede ser muy lejos igual, y uno estar viajando años. Solo los que tienen la mente muy fuerte, y pueden proyectar su mente claramente en las puertas, pueden viajar a donde quieran, o viajar solos luego de haberlo hecho muchas veces a alguna esfera. Y en muchos casos no se sabe porqué siempre los manda a un mismo lugar cercano, ida y vuelta, entre dos esferas. Todo es tan raro...

—Qué interesante, contame algo más

—Los guardianes no llegan a extenderse en el universo aproximadamente más de doscientos o trescientos años de viaje. Más lejos de esto se desconoce prácticamente todo. Y esto es re poco en lo que se supone hay de esferas. Hay seres muy distintos a nosotros, con los cuales uno ni se puede entender, ni uno sabe de dónde vienen.

—¿Sí?

—Sí. Sueñosreales me mostró uno que se veía como un humo colorido, con puntitos brillantes, como partículas suspendidas en el aire. Dice que la criatura se comunicó con él, en la esfera de los guardianes, y le mostró su esfera y la puerta, y que él calculó hasta allí un viaje de mil años. En el mundo de este ser era todo re loco, como si ellos pudieran modificar el entorno. Pero la población de estos seres era poca, en una inmensa esfera por lo que demostró muy separados uno de otro, tal vez menos de diez mil habitantes.



Es la página 158 de la novela.
—¿Y qué hizo esa cosa? ¿O qué pasó?

—Nada, recorrió un poco los alrededores. Entró en algunas instalaciones. Aunque no salió del amplio sector que pertenece a los guardianes… y se volvió a ir. Hizo una extraña estructura que nadie sabe qué es, y se supone fue un regalo decorativo, porque se ve lindo...

—Impresionante. Y claro... quién va a querer viajar trescientos años o más, entre ir y volver son seiscientos. Cuando volviste ya no te extraña nadie, quizás nadie se acuerda de vos, todo lo que conocías cambió, y para ese tal vez paso solo un mes. ¡Qué loco!

—Sí, loquísimo. Che algún día espero nos reunamos todos a tomar cerveza en Buenos Aires, unas vacaciones todos juntos de unos meses…

—Estaría buenísimo, uff yo casi no recorrí nada. Todavía nos buscan un poco, si me reconocían las personas incorrectas iba a ser un problema...

(Fin del capítulo)