Leer la novela online: Novela "EL Grupo de los Diecinueve Jóvenes 2" Separados en Esferas Lejanas.

Es la página 99 de la novela.
—Eso les es fácil a ustedes —dice Esperanza—. Que pueden moverse rápido y demás cosas. Pero supongo que hay que hacerse respetar las decisiones de estar juntos cada uno con su pareja. Ya nos han separado una vez...

—Sí, pero si nos llegan a separar ¿nos esperamos? —Habla David—. ¿Eternamente? ¿Nos reunimos en la esfera de los guardianes?

—Sí, tal cual —opina Verónica y añade—. Y nos pondremos de acuerdo para reunirnos todos allí. Y nosotros decidiremos nuestro destino. Los diecinueve juntos, aunque en realidad tendríamos que buscar otro lado… Yo me imagino que si ahora todos nos perdemos, automáticamente trataríamos de volver a nuestro hogar y encontrarnos allí, en la Tierra.

—Sí —opina Pablo—. Supongo todos nos buscaríamos en la Tierra, aunque nos costara encontrarnos a un tiempo. Tarde o temprano nos cruzaríamos allí, en donde solíamos estar.

—Sí cariño —dice Verónica.

—Si no nos perdemos… —opina David.

Y sin saberlo, al poco tiempo decidieron que de ser necesario se revelarían a cuantos se opusieran. Pero primero supusieron necesitaban estar todos juntos, y no separados en esferas lejanas ¿Quién se atrevería a desafiar a los diecinueve aprendices de guardianes estando juntos? Pensaron, ni aún El Anciano o Sueñosreales. Además no les iban a dar serios motivos, como para que se junten muchos a atacarlos... Pero separados no poseen la fuerza de poder decidir sobre sus vidas, sus rumbos. Así comenzaron a planear por amor, amistad, y deseos de libertad. Transitaron disfrutando estar juntos, disfrutándose el uno al otro, el romance, la amistad, la brusca naturaleza, llena de momentos bellos que los envuelven. ¿A quién no le gusta disfrutar cuando puede?

Pero a los días descubren algo que los hizo estremecer en sus almas. Gritos de gran dolor, lejanos; llaman la atención de Verónica y Pablo. Avisan a David y Esperanza, y se adelantan a investigar. Llegan a un campamento, con cerco en su perímetro, construcciones entre árboles, y movimiento de gente de apariencia humana.



Es la página 100 de la novela.
Está custodiado por hombres armados con armas que Verónica y Pablo ignoran qué hacen, pero presuponen son armas, por como las llevan. Verónica rápidamente rodea la zona sin ser aparentemente vista, aproximadamente tiene doscientos metros cuadrados. Ambos se alejan de tal lugar, y describen la situación a Esperanza y David.

—...Se escuchaban muchas quejas y gritos de dolor, no sabemos las costumbres de esta esfera, pero parece ser que allí tienen prisioneros. Hay gente, tienen apariencia semejante a humanos, están armados con unas armas semejantes a rifles que no sabemos qué disparan. El lugar está camuflado incluso con un tipo de red que lo cubre con el color del lugar, por su parte superior.

—Y estoy seguro es un lugar hostil, lo siento —Dice Pablo.

—¿Qué hacemos? —Pregunta Verónica—.

No lograban estar de acuerdo, Esperanza y Verónica querían investigar, y de ser un lugar malo liberar a la gente. Porque nadie se merece sufrir torturas, y presuponían era lo que estaban haciendo allí, por los gritos, alambrado, y sujetos armados. David no estaba seguro de qué hacer, pero dice que no puede ignorar lo que allí ocurre. Pablo, opina que tienen que cumplir con su misión, sin involucrarse en lo que no les concierne. Y se la pasaron un momento cada uno opinando, hasta que Verónica dice:

—Voy a ir a investigar más, puedo acercarme sin que me vean. Ustedes quedencen cerca, así si me pasa algo voy a ustedes. Intentaré ver qué ocurre, y les guste o no, lo haré. Me muevo rápido, y no me notarán esos extraños. Y si lo notan pensarán cualquier cosa según sus creencias. Nos reunimos en la piedra cercana que sabe Pablo, nos vemos ahí.

Dijo eso, y se fue.

Verónica puede moverse rápido es cierto, pero solo unas cuatro o cinco veces más que alguien normal y de forma semejante. Es decir una persona normal puede correr bien rápido 100 metros y se cansa, Verónica puede correr entre cuatro o cinco veces más rápido entre unos 500 o 1000 metros y se cansa. Y también depende de qué tanto entrene, qué tan bien alimentada está y descansada… Es curioso que Pablo también posee un poco más de velocidad de lo normal, pero su velocidad no llega a más del doble. Su verdadera fuerza, está en su resistencia, aún no lo sabe pero podría estar peleando varios días enteros sin cansarse. Además siente el peligro, y posee una habilidad de poder bloquear ciertos ataques o producir un golpe… como decirlo “energético” junto a un grito que emite para concentrarse.